La Facultad de Química ha aportado varias innovaciones y soluciones durante la crisis sanitaria desatada por el coronavirus.
Un equipo interdisciplinario conformado por docentes de las Facultades de Química, Ingeniería y Escuela Universitaria Centro de Diseño desarrollaron un nuevo tipo de hisopo con cabezal de silicona para recolectar muestras de COVID-19.
En diálogo con Montevideo Portal, Ricardo Faccio, docente e investigador de la Facultad de Química que trabaja en este proyecto, explicó cuáles son las características de estos hisopos y sus principales ventajas.
"Cada kit involucra dos hisopos y estamos hablando de que se consumen cerca de 7 mil hisopos diarios para estas muestras. Sabíamos que hacía falta este tipo de material y buscamos como alternativa el material sintético para crear estos hisopos de silicona y otros de fibra sintética", explicó Faccio.
Faccio comentó que "la silicona es un material sintético que se puede preparar con calidad de grado médico".
"Es bastante más flexible que los hisopos convencionales. Los hisopos al ser de fibra capturan mucho fluido, lo cual es bueno, en el caso concreto de las muestras virales de coronavirus no es tan importante la cantidad de fluido, sino de células que uno arranque, que es donde está el material viral (el ARN que es lo que finalmente se quiere extraer".
"Un buen hisopado tiene que tener un balance entre cantidad de fluido y posibilidad de arrastre de células. Como esto es como ´una goma´ y se deforma mucho es posible arrancar buena cantidad de células", agregó.
El investigador señaló que en principio se hicieron prototipos para determinar qué forma debía tener y usaron impresiones 3D para hacer moldes. "Usamos silicona en frío para ir probando los diseños. La idea es llevarlo a nivel industrial donde la posibilidad de producción ronde, aproximadamente, cuatro mil hisopos por día", señaló.
"La silicona permite el moldeado en frío y en caliente. En el caso de moldeo en frío es como poxipol: se mezclan dos pomos, se espera unos minutos y el material adquiere la forma", dijo el investigador.
En ese sentido, el docente de la UdelaR destacó la complementariedad que supone, en estos momentos, el desarrollo paralelo de varios modelos de hisopos llevados adelante por las Facultades de Química, Ingeniería y Arquitectura, con posibilidades y recursos diferentes.
"Ninguna iniciativa compite con la otra. Creemos que es una buena forma de que el mercado pueda dar una buena propuesta con iniciativas complementarias. Aportando a una mayor cantidad de análisis", aseguró Faccio.
"El hisopado no es para nada confortable, pero en términos comparativos podemos decir que es de los más confortables. Al ser una silicona muy flexible no es tan invasiva y es una buena alternativa. Se ha probado con pacientes de distintas edades", comentó el investigador.
Un pasito más
Hay cuatro estudios que se deben hacer para que el hisopo sea aprobado por el Ministerio de Salud Pública. Faccio sostuvo que el producto "ya superó tres de las cuatro etapas estipuladas para su desarrollo".
El ensayo de carga y descarga, la valoración de otorrinolaringólogos (en el Hospital Maciel y ASSE) y el estudio de no-inhibición de polimerasa de ARN (de forma de no interferir en el estudio RT-PCR) en el Instituto Pasteur de Montevideo.
"Ahora estamos en una etapa muy interesante que nos va a permitir producir miles de hisopos por día", explicó Faccio. "Hay que hacer la prueba en campo, probar 10 pacientes positivos y 10 negativo. Si esa etapa se cumple se completa el estudio", agregó.
Faccio dijo que en el caso de esa cuarta etapa "la va a llevar adelante la empresa que va a comprar el kit".
"Todo indica que el estudio va a andar bien. La silicona es un material utilizado para otros propósitos y está demostrado que funciona. Los estudios preclínicos dan tranquilidad de que la última etapa va a dar bien", aseguró.
"Estamos en la etapa de transferir a la empresa que hace el cabezal de silicona que finalmente se lo va a vender al laboratorio que va a comercializar el kit", concluyó.
Montevideo Portal