"Estamos lanzando una asociación con varios desarrolladores para proporcionar servicios gratuitos a las organizaciones de atención médica para ayudarles a usar Messenger a gran escala en su respuesta a la crisis del COVID-19", dijo Facebook en un comunicado el lunes.
Las redes sociales se enfrentan a una ola de desinformación ligada a la crisis sanitaria con la difusión rumores infundados y peligrosos consejos falsos en momentos en que 1.700 millones de personas en el mundo están confinadas en sus hogares y muchas de ellas mantienen el contacto a través de sus plataformas.
Facebook también lanzó un "hackathon" el lunes para invitar a voluntarios a diseñar soluciones utilizando las herramientas de Messenger.
Los codificadores podrían por ejemplo ayudar a las instituciones de salud a automatizar las respuestas a las preguntas más comunes, para que su personal pueda concentrarse en tareas más complejas.
Unicef ya está utilizando Messenger para informar sobre el COVID-19, según Facebook.
La red social multiplicó las medidas para que sus diferentes plataformas no contribuyan, indirectamente, a alimentar la incertidumbre y el pánico.
Su mensajería WhatsApp es acusada notablemente de permitir la circulación de mensajes contraproducentes, que se transmiten entre la gente.
"Pido a todos que dejen de compartir noticias no verificadas en los grupos de WhatsApp", tuiteó el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, la semana pasada.
"Estos mensajes asustan a las personas. Los perturban y pueden causar daños reales. Utilice fuentes oficiales y confiables para su información".
AFP