La medida, encaminada a ralentizar la distribución de desinformación, se aplicará a grupos tanto privados como públicos, en los que la plataforma detecte un gran número de publicaciones que violen sus políticas.
Cuando así ocurra, la plataforma pondrá bajo un periodo de prueba de 60 días a los grupos detectados, lo que obligará a los administradores y moderadores a aceptar las publicaciones de forma manual, con el fin de que sean más reponsable con lo que ocurre en ellos.
Durante este tiempo, la compañía monitorizará la actividad del grupo, y en caso de que permita que sus miembros sigan publicando contenidos que violen las normas, podrá cerrarlo definitivamente.
El periodo de prueba, como informa The Washington Post, no admite recurso ni puede anularse. Se trata de una medida temporal, que se aplicará a los grupos de contenidos políticos o sociales, en el marco de las elecciones estadounidenses.
Con información de Europa Press