España fue el tercer mayor inversor de la UE en tecnologías cero emisiones en 2023 y se está convirtiendo en un “centro neurálgico” de las industrias verdes en una Unión Europea, que debe actuar como bloque para no perder terreno frente a China y Estados Unidos, según un estudio publicado este domingo por el centro de pensamiento Strategic Perspectives.
“España está sacando el máximo partido de la era industrial de cero emisiones netas, convirtiéndose en líder en energía eólica y solar y estableciéndose como futuro centro neurálgico de las tecnologías limpias en Europa”, señaló en un comunicado el director de Strategic Perspectives, Neil Makaroff.
En concreto, España invirtió en ese área en 2023 un total de 30.710 millones de dólares, una cifra que “se ha multiplicado por tres desde 2019”, mientras que Alemania y Francia acapararon el 45 % de esas inversiones a nivel comunitario.
Ese impulso está ligado a las “políticas proactivas y a importantes inversiones que han creado 168.000 puestos de trabajo solo en el sector de las energías renovables”, agregó Makaroff.
Strategic Perspectives considera, además, que la nominación de la actual vicepresidenta española y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, como candidata a ejercer de vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea, comisaria de Competencia y supervisora de las políticas climáticas supone “una oportunidad para extender la historia de éxito de España a toda la UE”.
“Ningún Estado miembro puede competir solo con China y Estados Unidos”, aseguró Neil Makaroff.
Ese centro de pensamiento, con sede en París pero orientado a la política comunitaria, sostiene que la pujanza de España en ese ámbito se debe al despliegue de renovables, situándose justo por detrás de Francia y Alemania en cuanto a inversiones en tecnologías limpias, lo que “está reconfigurando su economía”.
En términos de empleo, el sector de las energías renovables y de las bombas de calor, por ejemplo, ha generado más trabajos en España que en Francia en 2022, con 168.050 y 150.030 empleos, respectivamente.
Además, España es uno de los “hubs eólicos y solares más fuertes de Europa, con más de 115.000 empleos”.
“La voluntad del Gobierno de atraer la fabricación de baterías demuestra que el país puede convertirse en uno de los centros neurálgicos de la tecnología limpia europea de aquí a 2030”, agrega el informe, que señala que si España desarrolla sus proyectos de fabricación de baterías (con una capacidad acumulada de 98.000 MWh en 2030 pero 0 en la actualidad), pueden convertir al país “en un polo industrial de tecnologías limpias en los próximos años”.
Inversión en la UE
Más allá de España, las inversiones vinculadas a la transición hacia una economía descarbonizada fueron responsables del 30 % del crecimiento económico de Europa en 2023, según el estudio, que señala que la UE sigue siendo un destino atractivo para las inversiones, pero avisa de que el bloque comunitario debe reaccionar para no perder terreno frente a China y Estados Unidos.
El informe concluye que la Unión Europea siguió siendo en 2023 “el segundo lugar más atractivo para los inversores en tecnologías limpias”, con 334.000 millones de dólares en el pasado ejercicio.
El célebre Informe Draghi sobre la competitividad de la UE elaborado por el expresidente del Banco Central Europeo recomienda que la Unión Europea invierta 800.000 millones anuales para financiar las reformas que mantengan su competitividad al tiempo que transita hacia una economía descarbonizada.
El estudio de Strategic Perspectives destaca que 1,6 millones de personas en la UE trabajaban solo en el sector de las renovables en 2022, lo que constituye “un activo económico” para el proyecto comunitario.
Además, el Pacto por una Industria Limpia que la próxima Comisión Europea presentará en sus primeros cien días de ejercicio podría generar 1,6 millones de empleos verdes adicionales para 2035, según ese centro de pensamiento, que eleva esa cifra hasta los 2,1 millones de trabajos en 2040.
Esto ocurre en un contexto en el que la competencia internacional en la carrera por dominar las tecnologías verdes es ardua, como demuestra que solo China concentrase el 39 % de la inversión mundial en 2023 con 654.000 millones de dólares.
Además, el gigante asiático “controla toda la cadena de valor cero emisiones netas” y los productos chinos “se benefician de fuertes subvenciones e importantes economías de escala debido al tamaño de su mercado nacional, lo que hace que los productos ecológicos chinos sean altamente competitivos”.
El otro gran contendiente es Estados Unidos, que a través de su Ley de Reducción de la Inflación ha aumentado las inversiones limpias hasta los 288.000 millones de dólares, duplicando la capacidad de fabricación de tecnologías limpias en 2023 y creando más de 334.000 puestos de trabajo.
EFE