Colegio católico expulsó a tres niños al saber que su madre sube fotos eróticas a OnlyFans

OnlyFans, un servicio de suscripción de contenidos creado en 2016, le ha permitido encontrar una salida laboral a Crystal Jackson, una mujer californiana de 44 años que en redes sociales se hace llamar Mrs Pointdexter. Sin embargo, su trabajo generó que el colegio católico al que iban sus tres hijos, los expulsara.

Crystal sube material erótico a sus redes sociales, aunque no necesariamente pornográfico, y sus seguidores o fans pagan por ello. "El primer mes ganamos US$ 14.000 y dijimos, ‘¿qué?'", contó la modelo a Fox News. Jackson se sumó a OnlyFans en 2019 y desde entonces trabaja junto a su esposo, que es quien le toma las fotografías y registra los videos. La plataforma cobra 20% de comisión a sus usuarios.

Mrs Pointdexter tiene 158 mil seguidores en Twitter, 581 mil en Instagram y hoy gana unos US$ 150 mil al mes. "Lo consideramos artístico, sensual, sexy y divertido", comentó en la entrevista con Fox News.

Sin embargo, el negocio le ha traído algunos problemas. La mujer contó a CNN que hace varios meses, un grupo de madres del colegio de la parroquia del Sagrado Corazón de Sacramento, adonde iban sus hijos, pidieron que los expulsaran. La dirección del colegio adoptó la medida tras conocer las imágenes y le explicó en una carta que "su aparente búsqueda de controversias de alto perfil en apoyo de su sitio web para adultos está en conflicto directo con lo que esperamos impartir a nuestros estudiantes".

Auge en Venezuela

La agencia de noticias France-Presse (AFP) publicó un informe en enero sobre el desarrollo de OnlyFans en Venezuela, en el que se destaca que jóvenes venezolanos han encontrado en la venta de contenido sexual una salida a la crisis económica que sufre el país.

"Estaba loca por irme, porque no estaba viviendo bien (...). Ahora me quiero quedar en Venezuela gracias a OnlyFans", contó a AFP Valery López, de 20 años, sobre esa red social, que nació como una plataforma para 'influencers', pero que ha derivado en una especie de centro de contenido para adultos y pornográfico.

Valery encontró allí una atractiva fuente de ingresos: "Puedo pagarme [la mejora de] mis dientes, comprarme ropa...", dice esta joven que acaba de hacerse un tratamiento de ortodoncia. "¿Quién está ganando ahorita US$ 500 o US$ 1.000 mensuales? Nadie", se responde.

Su canal tiene más de 50 suscriptores, todos extranjeros. A cada uno le cobra U$ 10 por mes, seis veces el ingreso mínimo mensual en Venezuela, pulverizado por la hiperinflación y la constante depreciación de la moneda local.

Este es un punto que destaca Abel Saraiba, psicólogo y coordinador de la ONG Cecodap, enfocada en los derechos de niños y adolescentes. "En otros países donde no hay una emergencia humanitaria ha habido un alza en el consumo" de contenido de plataformas como OnlyFans, dijo Saraiba a AFP. "Pero en el contexto nuestro podemos darle una dimensión adicional (...), ¿hasta qué punto [una persona] adoptaría esta modalidad tan riesgosa si tuviera otras opciones de trabajo?", se preguntó.