Desbordada por el número de contagios de COVID-19, la sanidad italiana trabaja a marchas forzadas en busca de soluciones que le permitan acoger y tratar a una cantidad de pacientes para la que no estaba preparada.
Para colmo de males, las unidades de cuidados intensivos son las que más se resienten con esta demanda, dado el enorme número de casos respiratorios graves que requieren el uso de respiradores mecánicos.
Fue en busca de soluciones para esa penosa coyuntura que surgió CURA, un innovador proyecto arquitectónico y sanitario open source, creado para construir Unidades de Cuidados Intensivos portátiles y con capacidad flexible.
Según informa la web especializada TicBeat, del proyecto han participado diseñadores internacionales, ingenieros, profesionales médicos y expertos militares.
Esta interacción permite la creación y envío rápido de unidades portátiles de cuidados intensivos dentro de contenedores. Pueden funcionar como salas para pacientes con COVID-19, o retirarse del contenedor para instalarse en carpas. Asimismo, es posible ensamblar varias de estas unidades si las necesidades así lo requieren.
En la actualidad ya se está trabajando en la creación de un primer prototipo, en la ciudad de Milán.