"La crisis actual destaca la importancia del acceso a internet de muy alta velocidad para empresas, servicios públicos y ciudadanos, pero también para acelerar el paso hacia 5G. Por lo tanto, debemos trabajar juntos para lograr un despliegue rápido de la red sin más retrasos", declaró este viernes la vicepresidenta ejecutiva de la CE en materia de Digitalización, Margrethe Vestager.
El Ejecutivo comunitario publicó una recomendación en la que invita a los Estados miembros a dotarse, antes del 31 de marzo de 2021, de un "enfoque común" para el despliegue de esas conexiones de gran velocidad, y a presentar un primer esquema en diciembre de 2020.
La CE quiere que una de las prioridades de ese enfoque compartido se centre en "reducir el coste y aumentar la velocidad de despliegue de redes de muy alta capacidad, en particular eliminando obstáculos administrativos innecesarios", que hacen perder parte de las "inversiones sustanciales" que la UE necesita en redes.
Bruselas también pide que se impulsen "las inversiones de los operadores en la expansión de la infraestructura de red" y recomienda aspirar a "una mayor coordinación transfronteriza para las asignaciones de espectro radioeléctrico (...), particularmente en los campos de la industria y el transporte".
Para 2025, la Comisión quiere que las principales rutas de transporte de la UE por carretera, ferrocarril y vías navegables interiores dispongan de una cobertura 5G ininterrumpida.
"Sin embargo, hasta mediados de septiembre de 2020, los Estados miembros (y el Reino Unido) habían asignado de media sólo el 27,5 % de las bandas pioneras de 5G", avisa la CE, que llama a los países a evitar o minimizar "cualquier retraso" al tiempo que se garantice "que las redes 5G sean seguras y resistentes".
"Las infraestructuras digitales han demostrado ser cruciales durante la pandemia para ayudar a los ciudadanos, los servicios públicos y las empresas a superar la crisis y, sin embargo, las inversiones recientes se han ralentizado", lamentó el comisario europeo de Mercado Interior, Thierry Breton.
Superordenadores
En paralelo, también en materia de digitalización, la Comisión presentó una propuesta para reforzar el ecosistema de superordenadores EuroHPC con una inversión de 8.000 millones de euros entre 2021 y 2033, de los que 3.500 millones provendrían del presupuesto de la UE, otro tanto de los Estados miembros y 1.000 millones más de inversiones privadas.
El presupuesto inicial del EuroHPC fue de 1.100 millones entre 2018 y 2020, de los que la CE aportaba 536 millones.
La financiación reforzada ayudará a las empresas a crear negocios innovadores, permitirá desarrollar nuevas aplicaciones y modelos en ámbitos como la medicina o la acción climática e impulsará sinergias entre los supercomputadores, la inteligencia artificial, el "big data" y las tecnologías de la nube digital, según la CE.
Con información de EFE