La Comisión Europea y la Agencia Espacial Europea (ESA) firmaron este lunes los contratos para la puesta en marcha de la nueva constelación de satélites europea IRIS², que correrá a cargo de un consorcio industrial liderado por la española Hispasat, entre otras empresas.

Se trata de una “constelación multiórbita de más de 280 satélites que proporcionarán comunicaciones resilientes, seguras y rápidas a gobiernos de la UE y empresas europeas” y cuyo primer satélite está previsto que se lance en 2029, según explicó la ESA en un comunicado.

En concreto, el nuevo sistema contará con 264 satélites en la baja órbita terrestre y 18 satélites de órbita media, lo que permitirá que estos se comuniquen entre sí de forma segura y rápida y permanezcan siempre conectados sin necesidad de poner miles de satélites en órbita, añadió la agencia con sede en París.

“Esta constelación puntera protegerá nuestras infraestructuras críticas, conectará nuestras áreas más remotas y aumentará la autonomía estratégica de Europa”, dijo por su parte la vicepresidenta de la Comisión Europea para Soberanía Tecnológica, Seguridad y Democracia, Henna Virkkunen.

Esta nueva constelación se sumará a la ya existente Galileo, dedicada a la navegación civil por satélite y la observación de la tierra y utilizada con frecuencia para hacer evaluaciones de la situación en emergencias, como terremotos o inundaciones.

“IRIS² será un activo estratégico para la UE en apoyo de su soberanía. Además de mantener seguras las conversaciones gubernamentales, podrá ser utilizado por empresas comerciales para sus comunicaciones seguras en toda Europa”, explicó la ESA.

En concreto, se firmaron dos contratos, uno de ellos entre la UE y la ESA y otro entre esta agencia y el consorcio industrial SpaceRISE, liderado por los operadores Hispasat, Eutelsat y SES y que incluirá también a fabricantes de satélites y otras empresas, incluidas pymes.

Entre esos otros “socios clave” figuran las compañías Thales Alenia Space, OHB, Airbus, Telespazio, Deutsche Telekom, Orange, Hisdesat y Thales SIX, según precisó el Ejecutivo comunitario.

El presupuesto para IRIS² es de 11.000 millones, de los cuales 7.000 millones son financiación pública. La ESA se encargará de supervisar el trabajo del consorcio que desarrollará la constelación y de validar que se ponga en órbita, así como de su infraestructura terrestre.

“En un mundo geopolítico cada vez más complejo, asegurar comunicaciones gubernamentales resilientes, seguras y rápidas es fundamental”, dijo en un comunicado el director general de la ESA.

EFE