La empresa Tlon Space avanza en llevar adelante una base de lanzamiento de nanosatélites en el balneario La Esmeralda, ubicado entre Aguas Dulces y Punta del Diablo en Rocha.

En 2022, la compañía argentina presentó el proyecto al Ministerio de Ambiente, mientras la iniciativa implica que la construcción se lleve adelante en un predio perteneciente al Ministerio de Defensa Nacional.

Si bien aún no hay una habilitación por parte del Poder Ejecutivo, en una entrevista reciente, Pablo Vic, uno de los fundadores de Tlon, habló de “avances” con el gobierno uruguayo.

“Hemos estado en conversaciones y trabajado con los gobiernos [de Uruguay y Argentina] para avanzar. Estamos muy felices del soporte que estamos recibiendo. De parte del gobierno de Uruguay tenemos todo el apoyo para contar con un avance importante en tener el puerto espacial”, había dicho a mediados de febrero, en diálogo con el canal de YouTube Exploración espacial.

A esto, le sumó que la startup, fundada en 2018, trabaja con el objetivo “a mediano plazo” de contar con este sitio.

“Esos apoyos son muy importantes para desarrollar esta tecnología y que Latinoamérica pueda aportar su granito de arena en esto que es una mega tendencia a futuro que se viene, que es la actividad espacial”, dijo Vic.

De acuerdo con lo que informó el subsecretario de Ambiente, Gerardo Amarilla, a Montevideo Portal, la empresa, que opera en Uruguay bajo el nombre Welboy S.A., tiene vigente un “certificado de clasificación” hasta julio de 2025, que le permite avanzar con la propuesta mientras lleva adelante los trámites para obtener la “Autorización Ambiental Previa”, requisito para comenzar con la construcción.

“Seguramente antes de esa fecha tendrán esta autorización”, precisó Amarilla.

Sin embargo, varios colectivos de vecinos de La Esmeralda y Punta del Diablo, docentes de la Udelar y otros grupos locales, emitieron días atrás un comunicado dirigido a la opinión pública en el que manifiestan su “preocupación” por la “falta de transparencia” del plan.

“A pesar de la magnitud del proyecto, la información ha sido limitada y el proceso no ha sido discutido en la Junta Departamental de Rocha, lo que genera inquietud por posibles irregularidades en los permisos y los riesgos ambientales, técnicos y sociales asociados al cambio de uso en esta zona natural próxima a la Laguna Negra”, expresa el documento.

En esta línea, el colectivo Punta del Diablo Sostenible, parte de los firmantes de la misiva, lleva adelante una campaña en redes sociales en la que habla sobre las “posibles afectaciones a la fauna y flora de Rocha” de la base espacial.

En particular, el proyecto representa una amenaza directa a la biodiversidad y los ecosistemas locales.

De acuerdo con el grupo de vecinos, “el plan de la empresa incluye el almacenamiento de hasta 8.000 litros de combustible, con el riesgo de incendios y explosiones en una zona que alberga especies protegidas y que depende de un delicado equilibrio ecológico”.

“Además, se prevé el uso de peróxido de hidrógeno (H2O2) como propulsor de los cohetes, un componente altamente inflamable y peligroso para la fauna marina y terrestre”, apunta y dice que este químico puede afectar a organismos acuáticos, al ecosistema y la flora y fauna de la zona.

Por último, señalan que “cada lanzamiento conlleva riesgos asociados a la caída de piezas y objetos al océano”. Esto podría afectar las rutas de migración de especies marinas, como ballenas franca y tortugas marinas.