Artista usa IA para convertir crecimiento bacteriano en obras musicales

El artista Juan Baños presenta en su ciudad natal, Granada, la creación 'Retrato sin órganos - SalomÍA', que fusiona arte, ciencia y música con la Inteligencia Artificial como coautora. En la obra aparecen elementos destacados como una cabeza de San Juan Bautista con placas con cultivos bacterianos e incorpora la IA para desarrollar sinfonías musicales personalizadas.

El artista andaluz, que lleva años formándose y trabajando en nuevas formas de arte digital en EE.UU., ha incorporado la IA en este campo integrando la escultura, la música y la microbiología. Como resultado ha presentado una de sus obras más impactantes cuyo eje central lo forma una cabeza decapitada de San Juan Bautista, una escultura ejecutada por el imaginero Jonathan Alonso-Niño y que representa un retrato del propio Baños.

Rodeando la cabeza se disponen 12 placas de Petri que contienen un medio de cultivo ampliamente utilizado en microbiología para el diagnóstico clínico que, gracias a la contribución de la IA, se descifra en un salmo musical creado por algoritmos que convierte cada cultivo microbiano en una experiencia auditiva única. Esta música puede escucharse de forma interactiva a través de un código QR.

En el desarrollo de esta obra han participado microbiólogos y bacteriólogos de hospitales y de la Universidad de Granada que han sido responsables de recolectar y analizar las muestras de saliva de diferentes individuos. A partir de las imágenes proporcionadas por los cultivos obtenidos, un sistema de algoritmos de IA diseñado por el artista y denominados 'SalomÍA' ha descifrado el crecimiento bacteriano en forma de música.

LA SALIVA COMO ELEMENTO CURATIVO

Según relata el artista granadino, en las narrativas religiosas y espirituales la saliva es un elemento relevante ya que a menudo se ha vinculado con capacidades milagrosas y curativas. "Hemos utilizado este fluido por su carga simbólica, por relacionarse con la palabra. Además, la saliva no solo es rica desde un punto de vista microbiológico, su microbiota es genuina y representativa de cada individuo. Sería como una especie de DNI biológico, por lo que el resultado de la obra musical es único para cada persona", apunta Baños.

Incluso para los propios científicos este proyecto ha resultado inquietante ya que aseguran que en microbiología están aplicando la IA para el diagnóstico precoz de patologías y precisamente por eso esta propuesta les pareció sorprendente y disruptiva. A nuestro entendimiento este tipo de creaciones no tienen relevancia clínica, aunque desconocemos si en un futuro la IA podrá ir más allá. En cualquier caso, el resultado obtenido es sobrecogedor e invitamos a todos los curiosos a que conozcan este proyecto", dice uno de los microbiólogos involucrados.

Esta obra se puede contemplar hasta el 14 de abril en La exposición colectiva titulada 'Inteligencia Artificial en Educación y Creación Artística' en la Sala Taller del Palacio de los Condes de Gabia de Granada.

Europa Press