Los hechos tuvieron lugar en 2016, cuando la joven, de 21 años y estudiante en la Universidad de Oregon (Estados Unidos), envió a Apple su móvil iPhone, que había dejado de funcionar, para su reparación, y esta a su vez lo remitió a su contratista Pegatron, uno de sus reparadores oficiales, como recoge The Telegraph.
Según recogen documentos judiciales, dos de los reparadores de Pegatron en las instalaciones de Sacramento, California, publicaron diez imágenes de la víctima en diferentes grados de desnudez y un vídeo sexual desde su cuenta de Facebook, de una forma que daba a entender que los había compartido ella misma.
Las imágenes de la joven solo se eliminaron después de que sus contactos en Facebook las vieran e informaran a la víctima de su publicación. Todo ello causó una "angustia emocional severa" a la mujer, según los documentos.
Aunque la cuantía exacta de la indemnización no se ha hecho pública, por petición de la propia compañía, el acuerdo entre Apple y la joven ha tenido un valor de varios millones de dólares. Los abogados de la víctima habían reclamado 5 millones de dólares como compensación por los daños.
Apple confirmó los hechos a The Telegraph. La compañía incluiyó en el acuerdo una cláusula de confidencialidad, por el que la víctima no puede revelar los detalles del mismo, y despidió a los dos reparadores responsables de la publicación de las imágenes íntimas.
"Cuando nos enteramos de esta atroz violación de nuestras políticas en uno de nuestros proveedores en 2016, tomamos medidas inmediatas y desde entonces hemos continuado fortaleciendo nuestros protocolos de proveedores", ha asegurado Apple en un comunicado remitido al medio citado.
Con información de Europa Press