Una virulenta polémica se desató en las últimas horas en argentina a causa de una entrevista que la canciller Diana Mondino concedió al periódico Clarín luego de partir desde Pekín a París.
“Son chinos, son todos iguales”, sostuvo la funcionaria. La frase fue dicha cuando la entrevista giraba sobre el tema de la base china instalada en Neuquén. En concreto, se le preguntó si en las instalaciones había solo personal civil o, por el contrario, también existía presencia militar.
La frase de Mondino trascendió de inmediato e hizo que fuera acusada de “discriminadora” y “xenófoba”.
“En la base china nadie identificó que hubiera personal militar; son chinos, son todos iguales”, fue el titular que se le adjudicó a la canciller y que encendió la polémica, en medio de una relación tensa entre la Casa Rosada y Pekín.
Este viernes, y tras la viralización de sus dichos, la jerarca hizo su descargo y explicó lo que había querido expresar.
“Son todos iguales, son todos civiles. Son todos iguales los que participaron. Estábamos hablando de la visita a la estación espacial. Fue hace pocos días y lo que destaqué fue la naturaleza civil del personal, que no había uniformes. Los argentinos también eran todos iguales, ninguno uniformado”, dijo en declaraciones a Radio Mitre.
Para entonces, el sarcástico humor de los tuiteros ya se había cebado en la canciller y en su casposo comentario.