En la noche del domingo, Sergio Massa y Javier Milei, los dos candidatos a la presidencia de Argentina, se enfrentaron en un debate televisado, enfrentamiento verbal al que estaban obligados por la normativa del país vecino.
El duelo se rigió por un protocolo pautado de antemano y justo es decir que ambos contendientes procuraron mantenerse dentro del esquema. Fueron escasos lo momentos en los que se interrumpieron mutuamente o cruzaron las líneas.
La dinámica del enfrentamiento estuvo marcada por las actitudes de los candidatos, con Massa persiguiendo a su adversario con preguntas “por sí o por no” y Milei intentado mostrarse sereno, como forma de alejarse del perfil irascible y estridente que él mismo construyó —quizá a su pesar— durante la campaña.
Uno de los momentos más “jugosos” del debate se produjo cuando el oficialista confrontó al libertario con un episodio del pasado. Según contó Massa, Milei fue en sus épocas de estudiante un pasante del Banco Central Argentino (BCRA), institución que se propone cerrar si llega a la presidencia. Lo referido por Massa no es nuevo. Por el contrario, ya había sido abordado en medios e incluso forma parte del libro biográfico El loco, del periodista Juan Luis González.
En el debate, Massa insinuó que Milei abrigaba resentimiento con el Banco Central por no renovarle dicha plaza de becario, beneficio al que sí habrían accedido los demás pasantes de su camada. Asimismo, desafió al libertario a que ambos se sometieran juntos a una prueba psicotécnica, dando así a entender que un mal resultado en ese tipo de examen estaría detrás de su rechazo en la institución.
“Hagamos el psicotécnico los dos, que te negaste”, dijo Massa. “Yo no me negué, dije que estaba dispuesto. Cómo me voy a negar si cada vez que entré en una empresa lo tuve que hacer. Vos que viviste siempre del Estado no lo hiciste nunca”, replicó Milei.
“Vos trabajaste en el Banco Central, ¿sí o no?”, preguntó al punto al peronista. “Sí, era un pasante”, reconoció el opositor.
“Contale a la gente por qué no te renovaron la pasantía. Entiendo que estás enojado con el BCRA porque en algún momento te sentiste rechazado, se trata de ir al abrazo de lo que a uno lo rechaza”, pidió el actual ministro, y enfatizó su cuestionamiento.
“Javier, vos trabajaste en el Banco Central, ¿sí o no?”; ante la insistencia, Milei asintió. “¿Y por qué no te la renovaron? Contale a la gente”, se encarnizó Massa.
“Digo, digamos... era un estudiante”, atinó Milei. En ese momento, su oponente pareció percibir que su ataque había dado en un punto débil y sacó provecho: “Es muy importante, porque es parte de esta discusión respecto del psicotécnico”, arguyó. “Quizás vos tampoco la hubieras pasado”, se defendió Milei.
“Entiendo que estés con el Banco Central y hables de destruirlo, porque en realidad en algún momento te sentiste rechazado. No se trata de sentirse rechazado y atacar lo que a uno lo rechaza. Se trata de ir al abrazo de lo que a uno lo rechaza”, soltó Massa.
“Era un joven que, digamos, ni siquiera estaba graduado. ¿Cuál es el problema? La vida tiene fracasos y uno se pone de pie y sigue. No como vos, que seguís fracasando de la misma manera”, retrucó el candidato de La Libertad Avanza.
“Aprendí mucho de mis fracasos y algunos los compartiste conmigo, porque entre el 2013 y el 2015 venías a las oficinas del Frente Renovador. De los fracasos aprendí mucho y me forjaron y me templaron”, redarguyó Sergio Massa.
Ese breve “debate dentro del debate” generó una tormenta de reacciones en redes sociales, y la razón para ello es simple: pese a que sus protagonistas fueron nada menos que los candidatos a la presidencia, el episodio incluyó ese factor de éxito que funciona tanto en los más relevantes foros como en los pasillos de los más modestos conventillos: el chisme.
Por ello, las bromas, memes y humoradas al respecto surgieron de inmediato como hongos luego de la lluvia.