La saga "Final Fantasy", un clásico del mundo 'gamer', se vale de la nostalgia y un extraordinario realismo para deslumbrar a sus fans con "Final Fantasy VII: Remake", la imponente versión del mítico videojuego de 1997.
Una fantasía para cualquier jugador e, incluso, para cualquier persona que, fuera del mundo de los videojuegos, aprecie el diseño, la tecnología, la estética cinematográfica y, por qué no, una historia bien contada.
Eso es, exactamente, "Final Fantasy VII: Remake", que se lanza mundialmente -en exclusiva para ps4- este 10 de abril, un sueño hecho realidad que reúne todas las cualidades para convertirse en uno de los videojuegos más impresionantes, a nivel de realismo y jugabilidad, de todos los tiempos.
El clásico de 1997 fue una revolución en términos de innovación como pionero de un tipo de videojuego, el rol, conocido en Japón, que llegó a Europa gracias a este juego. Veintitrés años después son los usuarios de todo el mundo los que piden nuevos títulos a Square Enix, el estudio que desarrolla "Final Fantasy", y esperan con ansia el lanzamiento hasta de la más pequeña actualización.
Así lo cuentan Yoshinori Kitase, productor del videojuego, y Naoki Hamaguchi, codirector y diseñador del mismo, en una entrevista con Efe en la que destacan la importancia del usuario y el esfuerzo realizado para ofrecer un título a la altura de las expectativas de los fans de la saga.
"Tenemos gente no sólo de Japón sino de todo el mundo que está esperando el juego. Se trata de mucha gente que respeta el juego y que lo sigue desde el primer lanzamiento", apunta Hamaguchi, quien se incorporó a Square Enix en 2003 para desarrollar "Final Fantasy XII".
Dicho cumplimiento de expectativas y la necesidad de ofrecer "la mejor experiencia" a los jugadores supuso, como explican los creadores del título, que la fecha de lanzamiento de "Final Fantasy VII: Remake" se retrasara un mes.
Una situación que, paradójicamente, contrasta con el hecho de que, para evitar retrasos en la distribución del juego físico por la crisis del coronavirus, la compañía enviara con mucha antelación las copias físicas del juego a aquellos que las solicitaron en preventa, por lo que, sin duda, habrá casos de jugadores que hayan recibido el videojuego incluso antes de la fecha oficial de lanzamiento global.
"Final Fantasy VII: Remake" es uno de los juegos más esperados de este 2020 y, sin lugar a dudas, más que una nueva versión o reedición de un título se podría definir como homenaje a un clásico de hace más de 20 años que marcó un antes y un después en PlayStation.
Así pues, el juego respeta la historia original e, incluso, los escenarios y los planteamientos de escenas en el desarrollo de la trama serán iguales que en el título de 1997. El cambio llega a través de los nuevos gráficos y la tecnología a disposición de un equipo de desarrollo que, prácticamente, ha creado un proyecto cinematográfico.
Es interesante conocer que fue precisamente la búsqueda de realismo lo que, según Kitase, se convirtió en el mayor desafío cuando asumieron la producción del videojuego: "El mayor reto fue reimaginar el mundo usando el moderno estilo de gráficos que tenemos ahora a nuestra disposición".
Mientras que Hamaguchi completa la respuesta del productor: "Hacer un juego de hace 20 años, con la nueva tecnología a nuestra disposición, nos permite ser mucho más expresivos y representar la historia a un nivel más profundo". Y añade: es "el poder de la tecnología" el que hará "sentir al jugador que está ante algo nuevo y emocionante".
A razón de lo analizado hasta ahora se llega a la certera conclusión de que "Final Fantasy VII: Remake" tiene un 'target' perfectamente definido: los veteranos y conocedores de una saga que ha obtenido un éxito tal que llegó incluso a expandir sus "tentáculos" hacia el mundo del cine con dos cintas: "Final Fantasy: La Fuerza Interior" (2001) y "Final Fantasy VII: Advent Children" (2005).
En este 2020 lo que se expande es el universo de fantasía creado por Square Enix, así como la mente de unos jugadores que tendrán en sus manos una joya sin precedentes que les sumergirá en la absorbente historia que la ciudad de Midgar encierra.
(con información de EFE)