El pasado 14 de julio, la brasileña Graziely Soares cumplió 31 años. El hecho no sería noticia si no fuera por el detalle de que padece una severa hidrocefalia congénita, y los médicos dijeron cuando nació que no superaría los tres meses de vida.

La noticia fue devastadora para Adalgisa Soares Alves, la madre de la pequeña, quien decidió dedicarse de lleno al cuidado de su hija durante el tiempo que esta viviera.

La joven, que vive en cama, no habla desde hace varios años y hace poco perdió el sentido de la vista. A causa de la enfermedad que padece, la cabeza de Graziely no ha dejado nunca de crecer, por lo que resulta desproporcionada respecto al resto del cuerpo.

Entrevistada por el tabloide británico Daily Mail, Adalgisa explicó que su hija es uno de los raros casos en los que una persona con ese padecimiento alcanza la edad adulta.

“Siempre espero que viva por muchos años. Transmite energía positiva y siento una paz que se desborda cuando alguien la visita. Siempre le daré lo mejor porque nació de mi vientre, fue muy amada y deseada dentro de mi vientre y la amaré hasta el último día de su vida”, dijo Soares.

Adalgissa abrió tiempo atrás una cuenta en Instagram en la que comparte su vida cotidiana junto a la joven postrada. También solicita colaboración económica para el cuidado de Graziely, ya que requiere atención permanente y abundancia de insumos, como pañales de talla adulta.

Actualmente, la joven mide poco más de un metro y pesa 69 kilos, masa que se concentra especialmente en su cabeza. Su madre asegura que no le molesta el apodo de “bebé gigante”, pero sí le resulta ofensivo que se refieran a ella como “monstruo” o que le apliquen calificativos similares.

Además, aunque los médicos le dicen que su hija no oye ni entiende lo que se le dice, ella no concuerda.

“Nosotros hablamos, ella sonríe. Los médicos pueden incluso decir que no entiende nada, que no tiene cerebro. Pero, para mí, ella entiende”, asegura.

Recientemente, la abnegada madre se llevó una desagradable sorpresa: descubrió que en la red TikTok se había viralizado un video que recopilaba imágenes que ella misma había subido a las redes sociales y las mezclaba con otras de diverso origen.

En ese video, se decía que la “bebé gigante” había sido abandonada por su madre apenas nacer, y se narraba un verdadero culebrón al respecto. De hecho, sugiere que la niña fue criada por el padre, cuando en realidad su padre biológico hace más de una década que se desentendió de ella.

Dicho video acumuló una gran cantidad de visitas, lo que significó un beneficio económico para su inescrupuloso creador.

Por ello, la mujer publicó a su vez un nuevo video en el que denuncia la maniobra.

“Soy la madre de Graziely. Ustedes nos conocen, nos acompañan desde hace muchos años”, dijo la mujer a sus seguidores.

“Quiero hacer una denuncia de un video que está en TikTok, estoy muy indignada”, agregó mientras mostraba en su teléfono el video manipulado.

“Es una noticia falsa, tomaron el video del cumpleaños de Graziely”, explicó la mujer, quien recordó que nunca abandonó a su hija “ni cuando nació, ni ahora”.

Efectivamente, el video manipulado contiene imágenes de las publicaciones que Adalgisa hizo durante la celebración.

“No lo comparta, no dé like, estoy realmente indignada con ese video”, insistió.

Si desea colaborar con la manutención de Graziely, puede hacerlo aquí.