¿Un nuevo ordenador significa un mejor rendimiento? Tal vez no. Los últimos resultados de pruebas de rendimiento revelaron que el desempeño promedio de los procesadores CPU entre los usuarios está comenzando a estancarse.

Según informó PC Magazine, los datos provienen de PassMark Software, una empresa que ha ofrecido herramientas de evaluación de rendimiento para PC desde 1998. El martes, la compañía publicó un gráfico que rastrea los puntajes promedio de rendimiento de CPU enviados por usuarios de equipos con Windows durante un período de 20 años.

El gráfico muestra que el rendimiento general de las CPU en las últimas dos décadas ha mantenido una tendencia al alza tanto en computadoras de escritorio como en portátiles. Sin embargo, esta tendencia cambió al comparar los puntajes de referencia de 2024 con los de 2025.

“Esto es inesperado. El rendimiento promedio de las CPU en 2025 está bajando. ¿Quizás la primera vez en la historia?”, publicó PassMark en la red social X.

La empresa sugirió que más personas están adquiriendo hardware “más económico”, ya que pueden no ver la “necesidad de comprar equipos más potentes y costosos”. Un análisis más detallado de los datos muestra que la mayoría de las pruebas de rendimiento provienen de PC con procesadores de hasta 8 núcleos. “El porcentaje de usuarios con más de 8 núcleos es el mismo hoy que en 2020”, señaló PassMark.

En cuanto a las computadoras de escritorio, la compañía también destaca que el AMD Threadripper PRO 7995WX de 96 núcleos, lanzado en 2023, sigue siendo el procesador más potente según sus pruebas de rendimiento.

PassMark también sugiere que la presencia de software no deseado (bloatware) y el hecho de que muchos usuarios sigan utilizando Windows 10 en lugar de Windows 11 podrían ser factores que contribuyen al estancamiento del rendimiento, lo cual podría cambiar más adelante en el año, cuando Microsoft finalice el soporte oficial para Windows 10 el 14 de octubre.  

Según el sitio especializado, queda por ver si estos números son solo una anomalía o el inicio de una tendencia duradera, ya que el año apenas termina de atravesar su primer mes, por lo que es posible que los resultados de rendimiento mejoren a medida que más consumidores y empresas actualicen sus equipos.