Un viaje puede estar a un clic de distancia, al igual que lo puede estar una estafa o un virus que robe tus datos o paralice tu computadora. Eso no es nuevo. Ya desde los albores de internet, nos llegaban correos cargados de malware buscando agarrarnos desprevenidos. Lo bueno es que, en aquel entonces, muchos de esos mails no nos hacían caer, ya sus textos daban un mal augurio para el ojo avisor.
Hoy no es tan sencillo escapar de estafas y virus del estilo, más aún gracias a la ayuda de la inteligencia artificial generativa, un nuevo actor en el juego del avance tecnológico, pero también en el que juegan los timadores de internet.
Según reporta PCMag, el mercado web de compras y reservas de pasajes y paquetes turísticos es un campo fértil para quienes se valen de esta herramienta para perjudicar usuarios. “Expertos en ciberseguridad dicen que adoptar una saludable cantidad de escepticismo al comprar por buenas ofertas [en internet] sirve para defenderse de lo que podrían ser artistas del engaño; eso puede significar cambiar algunos de tus hábitos al comprar”, señala un artículo de la revista web.
La publicación explica uno de los métodos usados: “Los estafadores atraen a las víctimas publicando anuncios falsos en sitios de alquiler vacacional utilizando medios robados o generados por inteligencia artificial. Los anuncios a menudo muestran precios con grandes descuentos para alojamiento en lugares populares de vacaciones. Al hacer clic en un enlace del listado, es posible que acceda a un sitio web de reservas falso que infecte su dispositivo con malware o simplemente recopile sus datos bancarios y otra información personal. Cuando llegas a la dirección de tus supuestas vacaciones, el estafador ya se ha ido”.
Citan a McAfee, una de las mayores vendedoras de servicios de ciberseguridad, que en un reporte de 2024 indicó que las estafas online por presuntas ventas de viajes son un “gran negocio” para los timadores. Uno de cada tres encuestados en un sondeo señalaron que cayeron en una estafa vinculada con la compra de pasajes o paquetes turísticos y que casi un cuarto de los consultados perdió más de 1.000 dólares en una sola estafa.
Abhishek Karnik, jefe de investigación de inteligencia de amenazas de McAfee, dijo a PCMag que la mejor solución es mantener una base de escepticismo al navegar por internet en busca de descuentos y ofertas. A su vez, expresó que la IA generativa añade un nuevo y de alguna forma terrorífico obstáculo a quienes buscan esquivar a los timadores.
“Hoy en día, en muchos casos ver y oír es no creer”, afirmó Karnik. PCMag señala que eso se debe a que las nuevas herramientas impulsadas por IA generativa pueden crear un deepfake de una persona usando solo una foto, un video corto o unos minutos de audio.
Precisamente, los estafadores se han volcado a usar fotos de personas reales, videos y voces para hacer que las fachadas de sus engaños sean más creíbles. “Todo el mundo tiene un perfil de Facebook con fotos que pueden ser animadas. La gente tiene videos en YouTube o fotos de perfil en Linkedin. Debería ser algo que nos preocupe a todos”, dijo a la publicación especializada Ben Jacob, un investigador en seguridad de SecureWorks.
Según el reporte de McAfee, las estafas más comunes reportadas por viajeros involucran una tarjeta de crédito clonada o detalles bancarios ingresados luego de completar la información necesaria para una compra en una página web falsa, al cliquear en links de phishing o tras encontrar fotos falsas de destinos de viaje.
“Los delincuentes pueden crear sitios web falsos, fotografías de alojamiento falsas e incluso agencias de viajes falsas fácilmente utilizando herramientas de terceros que operan sin las restricciones de generación de contenido impuestas por OpenAI o Microsoft”, indica PCMag, al tiempo que agrega: “Abrace a su escéptico interior, incluso si eso atenúa un poco su optimismo. Si una oferta parece demasiado buena para ser verdad, sigue desplazándote. Si su instinto le dice que algo anda mal con un listado de vacaciones, o que la voz del vendedor en el teléfono no suena del todo bien, o que la sintaxis del texto que recibió no tiene sentido, no ignore el sentimiento”.