Tan firme está el mercado del gordo que este lunes, luego de una semana de escaso movimiento, los valores del ganado gordo y de reposición subieron entre 1% y 3% en la grilla de la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) para establecer nuevos récords de precios en prácticamente todas las categorías.
A nivel de la industria frigorífica empieza a haber un poco de resistencia a que continúa el ajuste al alza de los precios del gordo, con la voluntad de ponerle un tope a las cotizaciones. “Se nota un cambio, si bien está demandada la industria”, afirmó a Ganadería.Uy el consignatario sanducero Diego De María.
La agilidad con la que se concretan los negocios, puja entre plantas, preferencia por novillos especiales y vacas gordas, y entradas cortas -7 días es la norma- siguen marcando la tónica de un mercado pujante.
“No deja de sorprender”, dijo De María, que afirmó haber hecho negocios de novillos pesados especiales por US$ 5,60 el kilo esta semana “y algún negocio cerca de planta con algún centavo más”. Mencionó que “la referencia tope” está hoy en US$ 5,65.
Las vacas pesadas, aunque no especiales, se colocan a US$ 5,20 el kilo y las vacas de más de 500 kilos hasta US$ 5,30.
Por su parte, el consignatario Joaquín González, afirmó que los promedios por novillos gordos buenos andan en los US$ 5,40 a US$ 5,45 y los generales a US$ 5,30.
El precio de US$ 5,50 es para “los novillos que nadie tiene, que tienen que dar 260 kilos de carcasa y con buena terminación”. “Aunque la industria intenta bajar los valores, la gente esconde los ganados”, apuntó.
Con la escasez de novillos especiales, la vaca gorda de más de 500 kilos es demandada, y el precio casi empata al de la vaquillona, usualmente unos cuantos centavos más arriba.
“La industria había hecho una lectura de que iba a tener más ganado para antes de Semana de Turismo, pero tuvo que salir a pagar esos 5 centavos más, que fue el último aumento: el mercado sigue firme y no les da lo mismo a las plantas perder los ganados; están buscando”, analizó González.
Según De María, “estamos próximos a que se frene el ascenso” y las lluvias de la semana que viene podrían provocar que se achique la faena por una menor oferta y que se estabilicen los precios.
González coincide en que después de las lluvias “vamos a tener una ventana de 20 a 30 días de escasez de oferta, provocando el efecto contrario en los valores”.
En la medida que se siga faenado a este nivel, “en invierno va a escasear en serio el ganado y los frigoríficos están encerrando todo lo posible”, dijo Joaquín González.
Las lluvias pronosticadas serán fundamentales en muchas zonas del centro del país, donde el rebrote y el crecimiento de las pasturas se enlenteció en los últimos 15 ó 20 días.
En reposición el mercado también está sumamente ágil y con flechas hacia arriba. En la última semana el índice flaco/gordo subió de 1,06 a 1,09 pero se mantiene a favor del invernador, que tuvo que adoptar los valores del mercado (terneros a US$ 3,20, terneras llegando a US$ 3) para no quedarse sin ganado.
“La reposición está muy firme y no va a aflojar salvo por algo climático, y aun con las subas es una de las categorías que sigue estando más baja; en los próximos tres remates por pantalla va a seguir firme con algún centavo más”, sostuvo González.
En ovinos la demanda es buena, aunque dispar en valores entre plantas; con las plantas del norte del país pagando menos que las del sur.
Por Javier
Lyonnet para Blasina y Asociados
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