Por primera vez en la historia la aftosa golpea a las puertas de Australia y si llegara a la isla desde Indonesia, donde hay una epidemia que ha afectado a cientos de miles de vacunos, sería un cambio enorme para el mercado mundial de carnes. Australia es uno de los cuatro países que exportan más de un millón de toneladas de carne vacuna por año y un proveedor fundamental de los mercados asiáticos y de EEUU.

Este miércoles, el gobierno federal anunció medidas de bioseguridad en la frontera tras la detección de fiebre aftosa en vacas en Bali.

“Tras la confirmación oficial ayer por parte de las autoridades indonesias de que la fiebre aftosa se había extendido a Bali, se impusieron inmediatamente nuevas medidas para proteger a la industria ganadera de Australia de esta amenaza”, dijo el ministro de Agricultura, Murray Watt.

“Los materiales de alto riesgo no pueden ingresar al país, incluidos equipos o ropa contaminados, [y] animales o productos animales como productos cárnicos y queso”, agregó.

Si Australia quedase fuera del mercado internacional de carnes sería un tsunami. Australia exportará 1,5 millones de toneladas este año, está entre los tres países que siguen a Brasil (principal exportador mundial). Comparte ese segundo lugar con India y EEUU, que también exportan 1,5 millones de toneladas año.

Australia ha perdido pie en las exportaciones a China por diferencias políticas, pero sigue siendo proveedor fundamental del mercado chino.

Irrupción febril

La aftosa irrumpió en Indonesia a principios de mayo y ya ha contagiado a 230 mil vacunos. Que llegara a Bali disparó las alarmas por el fuerte turismo australiano hacia ese punto famoso por sus playas y entre los surfers.

La distancia física entre Bali y Australia es importante, unos 2.000 kilómetros. Pero el flujo de australianos volviendo de ese lugar es lo que constituye el riesgo importante. Australia ya ha determinado fumigar las suelas de los zapatos de los turistas que regresen mientras espera que el virus no llegue ya que su rodeo no está vacunado. Nunca hubo hasta ahora aftosa en Australia.

Durante el fin de semana, al menos 60 vacas habían dado positivo a la fiebre aftosa (FA) en la isla de Indonesia.

El veterinario de Bali Ross Ainsworth dijo que las posibilidades de que la enfermedad ingrese a Australia y amenace al sector de la carne roja del país “aumentaron dramáticamente”.

También dijo que era posible que los vacunos que dieron positivo pudieran haber sido infecciosos hasta por quince días, dado el tiempo que tomó evaluar a los animales y el tiempo de incubación de la enfermedad.

“Aquí en Bali, las posibilidades de que los turistas entren en contacto con el ganado son extremadamente altas”, dijo el Dr. Ainsworth.

“Así que es bastante serio”

“El gran período de peligro en Bali [y para Australia] es desde ahora hasta que el rodeo esté completamente vacunado, hasta que haya ganado vacunado en Indonesia corremos un riesgo mucho mayor”, expresó.

El Dr. Ainsworth dijo que se deben hacer cambios en las fronteras de Australia de inmediato, incluida la obligatoriedad de desinfectar los zapatos de cualquier persona que regrese de Bali a Australia para ayudar a detener la propagación de la enfermedad.

También recomendó un “interrogatorio más cuidadoso” de los viajeros que regresan sobre si han estado en una granja.

Agregó que los oficiales del aeropuerto estaban “operando con mayor vigilancia en todos los vuelos que llegan desde Indonesia”, sin embargo, no dijo si se introducirían nuevas medidas.

“Australia cuenta con estrictos protocolos de bioseguridad para evitar que los viajeros que pueden haber estado expuestos a animales enfermos traigan materiales de alto riesgo, como equipos o ropa contaminados, animales y productos animales. Estos mismos controles de bioseguridad están vigentes para todos los viajeros de Indonesia”, aclaró.

Australia viene recomponiendo stock

Las cifras de faena que proyectó Meat and Livestock Australia se han revisado a la baja para 6,15 millones de cabezas en 2022, mientras que el rodeo crecería 5,6% a 27,6 millones de cabezas en 2022. Se prevé que los pesos en canal récord compensen los menores volúmenes de faena, y se prevé que la producción aumente un 4,5 % hasta los 1,97 millones de toneladas.

Australia atravesó una muy grave sequía que terminó en 2020 y desde entonces viene recomponiendo stock.

Indonesia comenzó un programa de vacunación a nivel nacional a mediados de junio y los informes de los medios indican que el número de animales vacunados ha llegado hasta ahora a 169.782.

La fiebre aftosa es altamente contagiosa y representa una gran amenaza para el sector ganadero de Australia y la economía australiana en general.

ABARES estima que un brote generalizado tendría un impacto económico directo de A$ 80 mil millones (US$ 56 mil millones).

Dado que las condiciones estacionales favorables se mantienen hasta 2022 y continúa la reconstrucción del rebaño, se espera que el rebaño nacional crezca un 6 % hasta alcanzar los 27,6 millones de cabezas. Para 2024, se espera que la manada crezca un 4,6% adicional.

“El sur de Australia continuará impulsando el crecimiento del rebaño nacional con lluvias persistentes y sustanciales en las regiones ganaderas del sur de Queensland, Nueva Gales del Sur y Victoria”, dijo Bignell, y agregó: “Para el norte de Australia, requerirán una temporada de lluvias superior al promedio para impulsar su reconstrucción después de una decepcionante temporada de lluvias 2021-22”.

Además, a medida que el rodeo madure en el proceso de recomposición, se espera que muchas hembras jóvenes tengan crías con tasas de destete superiores a la normal dadas las favorables lluvias y así se espera que continúe el incremento nacional del rebaño.

“El sur de Australia está impulsando los precios más altos en el mercado y la fuerte demanda de novillas jóvenes. Mientras tanto, los sistemas del norte han visto una temporada de lluvias más baja que el promedio, y la reunión comenzó antes de lo habitual”, expresó.

Pesos de canal cada vez mayores

Se prevé que los pesos de las carcasas continúen alcanzando récords hasta 2022. Los pesos de las canales en el primer trimestre de este año alcanzaron un promedio nacional de 324,4 kg por cabeza, 10,8 kg más que el promedio en 2021, debido a las buenas condiciones estacionales en Australia.

“Después de una disminución de las tasas de faena, los pesos de las canales aumentaron posteriormente. Esto permite mantener la producción a un ritmo elevado. Además, los grandes volúmenes de ganado en los corrales de engorde están generando pesos de canal más altos junto con precios más altos, lo que incentiva a los productores a aumentar los pesos antes de vender”, dijo Bignell.

En 2024, se pronostica que los pesos de la carne vacuna se mantendrán altos. Las abundantes lluvias permiten que el forraje siga siendo abundante, pero el aumento de los precios de los granos podría ejercer presión sobre los sistemas de corrales de engorde.