“Estamos en proceso de un severo ajuste, con un nivel de actividad restringido y una oferta que no es demasiado voluminosa, pero que supera el nivel de actividad”, dijo a Ganadería.Uy Gustavo Basso, director de Gustavo Basso Negocios Rurales.
Se van generando demoras en las plantas con entradas más largas y un ajuste de los precios “que continúa avanzando en forma consistente”.
Este miércoles la referencia para los novillos estaba entre US$ 4,70 y US$ 4,75 y con plantas que no pasaban precio.
Según otro consignatario la industria todavía tiene intenciones de poder bajar más el precio del ganado, con la expectativa de trabajar en el eje de US$ 4,60 para el novillo, y la posibilidad de achicar aún más la faena.
Este miércoles la vaca gorda trataba de sostenerse en el eje de US$ 4,50 y la vaquillona en torno de US$ 4,65.
Basso señaló que el mercado está influenciado por una pérdida de competitividad muy fuerte respecto a Brasil, que está colocando grandes volúmenes de carne en China y limita la fluidez para otros mercados con un precio inferior de la materia prima.
“Tenemos incertidumbre respecto al nivel de actividad de la industria para noviembre y diciembre que son meses claves desde el punto de vista de la extracción”, adelantó Basso.
Si no hubiera un buen nivel de faena –está por debajo de las 40 mil cabezas hace dos meses- provocaría distorsiones en la colocación.
Según Juan Andrés Dutra, director de Dutra Hermanos, el mercado está difícil, dispar y entreverado con entradas entre 10 y 15 días. Desde el lado de la oferta “la lógica es que empiece a aparecer más ganado, más volumen” con verdeos impulsados por las últimas lluvias.
La reposición sigue firme y demandada.
En lanares, con buena demanda y mayor actividad de faena, el precio del cordero pesado está hoy por encima del novillo, en el eje de US$ 4,90; la oveja en US$ 4,30, y capones, US$ 4,35.
Por Javier Lyonnet