El Gran Premio de Arabia Saudita fue una gran carrera, Max Verstappen y Charles Leclerc brindaron una enorme lucha que se definió por medio segundo a favor del campeón de mundo. La temporada 2022 arrancó con todo y el nuevo reglamento confirma que se va por el camino correcto.

Fue un fin de semana muy movido para la Fórmula 1, como era previsible al correrse en Arabia Saudita y en un circuito callejero, veloz y peligroso. Ambos, tanto el país como el circuito, fueron protagonistas.

El viernes un ataque con misiles a una planta petrolera a, 20 kilómetros del circuito, sacudió al mundo de la Fórmula 1. La columna de humo se podía ver y oler desde la pista. Preocupados por la seguridad, los pilotos se reunión durante largo tiempo, pero finalmente tras recibir garantías de las autoridades, decidieron continuar.

El sábado la clasificación arrojó tres grandes notas. Sergio Pérez logró su primera pole position, por la que el mexicano debió esperar 11 largos años. Superó por muy escaso margen a Charles Leclerc, mientras que Max Verstappen apenas fue cuarto por detrás de Sainz. La clasificación ratificó que Ferrari y Red Bull estaban en otro nivel, ya que el quinto, Esteban Ocon clasificó a casi 7 décimas de Verstappen, que estaba a menos de 3 de su compañero de equipo en la pole position.

La segunda gran nota la dio Lewis Hamilton y fue una nota negativa. Clasificó 16to sin poder pasar a la Qualy 1, su peor clasificación sin fallas mecánicas mediante corriendo para Mercedes. La tercera nota, el palo tremendo que se pegó Mick Schumacher. Destrozó al Haas, dejó a todo el mundo nervioso porque demoraron varios minutos en confirmar que estaba ok y lo dejó sin correr, pero por suerte en buen estado de salud tras los chequeos correspondientes.

Si la carrera iba a tener 19 autos, se redujo a 18 cuando Yuki Tsunoda repitió en la vuelta de instalación los problemas mecánicos que tuvo en clasificación. El único auto motorizado por Honda que no había fallado en Bahrein, falló en la segunda cita.

La largada vio a Sergio Pérez manteniendo el primer lugar, mientras Verstappen superaba a Sainz para ser tercero. En el fondo Zhou volvió a perder potencia en su Alfa Romeo como en Bahrein pero tras quedar ultimo recuperó la marcha. Tras la acción de la primera vuelta lo mejor se vio en la lucha de los pilotos de Alpine, Estaban Ocon y Fernando Alonso libraron una batalla que le gustó a todo el mundo, menos a la gente del equipo Alpine que, de seguro, lo pasaron muy mal mientras los autos rosados rozaban los muros.

En la vuelta 16, Pérez fue a boxes y Leclerc no, y solo media vuelta después Nicholas Latifi chocó contra el muro. Lathifi, un Williams, un muro y un safety car, todo igual que en Abu Dabi. Esta vez el gran perjudicado fue Pérez, ya que al haber parado perdió la ventaja y cuando las Ferrari y su compañero pararon lo dejaron en la cuarta posición.

Reanudada la marcha pasó algo parecido a la carrera anterior, se cayó en un bache en el que no paso mucho durante 20 vueltas. Pero en la 36 llegó la debacle al mismo tiempo y por problemas mecánicos de tres autos, algo muy raro de ver en la Fórmula 1 actual. El Alpine de Alonso, el McLaren de Ricciardo y el Alfa Romeo de Bottas dijeron basta. Esto además de eliminar a tres protagonistas, generó un Virtual Safety Car que habilitó un final de película.

Se relanzó la carrera a falta de ocho vueltas con Verstappen a 1.5 segundos del líder. Y allí empezó el show, Max lo pasó antes de la última curva, pero el de Ferrari tenía DRS en la recta y volvió a pasarlo. En la siguiente vuelta pasó algo insólito y que muestra la inteligencia de Leclerc, cuando Max se le puso al lado antes de la línea de DRS, Leclerc se paró en el freno buscando quedarse el con el DRS. Si bien no lo consiguió, se distanció lo suficiente al sorprender con la maniobra a Max.

Pero en la vuelta 47 se terminarían sus chances, Verstappen finalmente lo superó. Leclerc lo persiguió hasta el final, pero no pudo alcanzarlo y el actual campeón ganó por 549 milésimas después de ocho vueltas finales que quedarán en la memoria. Los autos actuales permiten mucha más lucha, ese era el objetivo y lo han logrado.

Carlos Sainz fue tercero carrera dándole otro podio a Ferrari. Sergio Pérez debió conformarse con ser cuarto y lamentar su mala suerte. George Russell con el Mercedes fue quinto, muy lejos de Pérez pero con facilidad por delante del sexto Estaban Ocon que le ganó a Norris por 1 décima.

Russell mostró que el Mercedes es menos que Ferrari y Red Bull pero está por encima del lote del medio. Ocon sumó otra buena carrera y Norris mostró a un McLaren mejorado. Pierre Gasly sumó sus primeros puntos al ser octavo, Kevin Magnussen volvió a sumar para el sorprendente Haas al ser noveno pese a tener mala suerte con el safety car y Lewis Hamilton debió conformarse con sumar un solo punto cuando parecía que podía lograr algo más pero tuvo mucha mala suerte con el virtual safety car.

Todo indica que 2022 será un gran campeonato, con una gran lucha entre Lecerc y Verstappen y entre Ferrari y Red Bull. Aunque cuidado, en algún momento Mercedes se va a sumar a esa lucha, aunque seguramente sea tarde para pelear los campeonatos.

El mundial quedó liderado por Charles Leclerc con 45 puntos, 12 más que Carlos Sainz y 20 por arriba de Verstappen quien carga el lastre del abandono en Bahrein. George Rusell con 22 puntos es cuarto sacándole lo máximo posible al Mercedes y ganándole a Lewis Hamilton quien está en un desconocido quinto puesto con 16 unidades.

En dos semanas la Fórmula 1 volverá a Australia tras dos años sin llegar a Oceanía por el Covid-19 y, seguramente, tendremos otra gran carrera.