Era la primavera de 2011 y Liam Gallagher, Sonic Youth y Faith No More visitaban el Teatro de Verano. Tres bandas anglo llegaban a Montevideo. Era primavera del 2011 y Gaucho estrenaba un festival que seguiría vivo pasada una década, y que logró traer a músicos internacionales en todas las ediciones que siguieron. 

—Surge del impulso de querer hacer un festival. Pero el germen fue antes, cuando se empezó a abrir el mercado de shows internacionales.

Un año antes, en 2010, el Pilsen Rock se realizó en Montevideo con Pixies y Queens of the Stone Age, recuerda Danilo Astori, director de Gaucho. Con ellos se le endulzó el paladar. Había que traer a más. 

El concepto del festival “primaveral” ya existía; el Primavera Sound o el Primavera Fauna, por ejemplo. Es entre setiembre y diciembre que los artistas anglo bajan al sur. En Uruguay, el Primavera 0 termina por ser un homenaje a “un amigo de la casa”, dice Astori, por la canción de Gustavo Cerati que le da el nombre al festival de Gaucho.

—Cuando empezamos a pensarlo, la idea era que viviera todo lo posible.

En 2022 el festival cumple su décima edición. Para Astori, “el término festival es muy a la uruguaya”; la grilla no es una grilla clásica de la que participen varios artistas. En sus inicios llegó a haber seis artistas por fecha, recuerda. “Era mucho para Uruguay”. Con el paso de los años, el Primavera 0 fue aprendiendo —a prueba, ensayo y error— hasta llegar a un modelo que funciona. Ahora son menos artistas cada año y divididos en dos instancias. Pero la vigencia del festival se mantuvo con la música que llegaba año a año.

Foto: Javier Noceti / Montevideo Portal

—Traté de que el relato mantuviera una curaduría, un hilo artístico. Un hilo que tiene que ver con la calidad artística que tiene el festival.

Astori se refiere al tipo de sonido que atravesó los diez Primavera 0. Sobre todo, rock. Algunos “populares”, otros “no tan populares” y otros “más de culto”. Echo & The Bunnymen, Franz Ferdinand, Nick Cave, Patti Smith, Gorillaz. Y también sureños, como Andrés Calamaro, Juana Molina y Buenos Muchachos.

Con todas esas visitas Danilo Astori fue acumulando anécdotas y vínculos. Como cuando Iggy Pop comió churrascos de colita de cuadril con la mano después de su show. También cuenta que Damon Albarn (ex Blur y actual Gorillaz) se volvió un gran amante de la ciudad desde su primera visita a Montevideo. Le sacaba fotos al Palacio Salvo desde su habitación en el Radisson, recuerda Astori. Albarn luego eligió una de esas fotos para la portada del sencillo “Heavy Seas of Love”.

Después, el Salvo se convertiría en canción con “The Tower of Montevideo”: “La estrenó en el show de abril con Gorillaz, en la apertura del Primavera 0”, dice Astori. Y llevaría a Albarn al estudio que hay en ese edificio a grabar “canciones que aún no salieron”. 

Foto: Javier Noceti / Montevideo Portal