Florencia Bonavida —o Boni, su pseudónimo artísitco— y Mili Milanss ya se conocían, pero nunca habían compartido una fecha. Ella, psicóloga devenida en artista tras su participación en La Voz Argentina 2022, programa que le permitió darse a conocer y afianzar vínculos en el medio, como lo hizo con Lali Espósito, su guía en el proceso. Él, rapero y productor uruguayo que colaboró con Zeballos en la producción de su disco Asimetría. 

Nunca habían tocado juntos, pero su música se entrecruza de alguna forma, entre el pop de Boni y el rap de Milanss. Vapai, una plataforma que surgió en marzo de 2022, los une en un mismo escenario. Una de las premisas del proyecto es mezclar géneros y generaciones, intentando acercar propuestas que, en un principio, parecen opuestas pero que, en realidad, no lo son. 

Anteriormente se realizaron otras fechas de este ciclo, en la que participaron Gavo y Knak, Facu Balta, y Davus y Agustín Casulo. A través de estos encuentros y el contenido autogenerado, Vapai buscar generar difusión y contenido de calidad enfocado a la música uruguaya. 

En el marco de este proyecto, el viernes 28 de abril Boni y Mili Milanss se presentan en Inmigrantes. Las entradas en RedTickets están agotadas. Por consultas de remanentes, se deberá consultar a Vapai a través de sus redes sociales. 

Boni. Foto cedida por Vapai.

¿Cuándo empezaste a tocar?

Mili Milanss: En 2001 empecé a escribir, pero en 2006 empecé a grabar mis primeras cosas.

Boni: Más o menos, a los 12 años me subí a un escenario por primera vez, fue en el festival de un colegio que quedaba cerca de mi casa donde nos anotamos para cantar un par de temas junto con dos amigas. Me acuerdo de ver a lxs amigxs que habían ido a hacernos el aguante disfrutando del festival y de sentir que no lograba disfrutarlo del todo por la ansiedad que me generaba tener que subirme al escenario. Hasta que me subí, y ya no quise volver a estar del otro lado.

¿Te acordás en qué momento quisiste hacer música una banda?

M.M: Ya a los cinco años fantaseaba con cantar en conciertos enormes. Cuando empecé a rapear a los 12, supe que me iba a dedicar a esto.

B: Yo creo que, como la música estuvo presente en mi casa desde muy chica, las ganas estuvieron siempre ahí. Además, fue con Bonet, mi hermano, con quien formé mis primeras bandas en la adolescencia.

¿Cuál fue el primer disco que te marcó?

M.M: Californication de los Red Hot.

B: Back to black de Amy Winehouse. Qué mujer.

¿A qué músicos admirás? ¿Identificás influencias?

M.M: Eminem, Dr. Dre, Busta Rhymes, Redman, Royce da 5’9”, 2Pac, los Red Hot, por nombrar algunos de los que más admiré a lo largo de mi vida y más me marcaron. Pero la lista sería eterna. También tengo la suerte de trabajar con gente que admiro pila y que me influencian un montón.

B: Mis influencias más marcadas tienen que ver con el soul, r&b y y jazz, sobre todo artistas como Etta James, Ella Fitzgerald y Nina Simone, pero también con la música urbana. Siempre estoy en la búsqueda de conjugar ambos mundos, de combinar mi pasado y mi presente.

¿Hay alguna canción que te hubiera gustado haber compuesto? ¿Por qué?

M.M: Miles. Pero si tengo que nombrar una ahora, diría “Darkness” de Eminem, porque es una obra de arte.

B: Creo que no, disfruto mucho de apreciar el arte de lxs demás y de aprender de ellxs. Además, me gusta pensar que siempre hay canciones increíbles por hacer.

Mili Milanss. Foto cedida por Vapai.

¿Qué canción de tu proyecto te gustaría que versionara otro artista? ¿Quién sería?

M.M: “Humo entre nos” por The La Planta. No puede fallar.

B: Me encantaría escuchar (y bailar) una versión de “Rouge” por Shakira.

¿Cuál es la última canción que escuchaste?

M.M: “Beautiful little fools” de Jorja Smith.

B: “Obsesión”, del nuevo disco de Lali.

¿Y el libro que leíste?

M.M: No soy de leer libros.

B: Rayuela, de Cortázar; es un libro que releo siempre.

¿Qué te gustaría que sintiera la gente al escuchar tu música?

M.M: Motivación para lograr lo que se propongan.

B: Me gustaría que al escuchar mi música puedan sentirse acompañadxs, ojalá mi música esté presente en momentos cotidianos y especiales de las vidas de otrxs, acompañando moods o, por qué no, cambiándolos.