El barco sigue navegando a pesar de algunas tormentas en altamar (por ser novatos en todo lo que implica hacer radio). Pero la metáfora funciona, porque de alguna forma salimos a flote —o al aire— en el segundo programa de Beatniks.
Se celebró la sexta edición de la Noche de las Librerías y en Montevideo hubo 59 propuestas que, además de libros, convocaron a diferentes actores de la cultura uruguaya e internacional; recitaron, leyeron, entrevistaron, dieron charlas e intercambiaron ideas. LatidoBEAT estuvo por allí y se encontró con Florencia Núñez y Ernesto Tabárez, de Eté y los Problems (que hasta versionó al Darno) en La Lupa, una librería muy acogedora en la calle Bacacay.
Hablamos acerca esa noche de verano y nos gustó esta reflexión sobre lo que eso fue: música, literatura y gente reunida.
LatidoBEAT también estuvo por Pocitos Libros, donde se realizó la presentación de Patio de cuervos por la editorial argentina Crack Up. Su autor, Genniol, es el clown del punk argentino y, en realidad, Héctor Rosa, quien fue un amigo íntimo de Luca Prodan y hasta participó en la letra de “La rubia tarada”. Su primera novela narra la experiencia de Pocca como prisionero en un Gulag en Siberia.
Pero nuestra lengua se apalabró de La Vela Puerca. LatidoBEAT también estuvo por allí. Y nos preguntamos lo siguiente: ¿el concierto de una banda en vivo puede convertirse en una fiesta nacional? Nuestra respuesta, efectivamente, es que la banda uruguaya de 27 años y 11 discos sí tiene ese puesto en el podio. Grupos de amigos, padres y madres, sus hijos. La Vela Puerca en el Velódromo ya parece ser un evento intergeneracional. Canciones como “José Sabía”, “El Viejo”, claro, y “Zafar” —aunque son muchas más— podría decirse que son parte del ADN musical uruguayo. Quizás con Jaime Roos, Chacho Ramos y algún otro pueda pasar lo mismo. Porque la música es parte de la identidad nacional. Sobre eso, conversamos.
va: