Por Pancho Pastori de Casa Arbus | @casaarbus
Gustavo Einer Rosas López, y Gonzalo Gómez Gaggero, son una dupla de fotógrafos uruguayos de 39 y 44 años respectivamente, que se dedican a la fotografía callejera y que pueden encontrar en redes bajo el nombre de "Shot".
Hacen de las calles su lienzo, y logran encontrar la magia en el mismo escenario que todos transitamos día a día, sin observar grandes maravillas aparentes.
Los conocí en 2018, cuando inauguramos Casa Arbus. En busca de exposiciones para nuestra sala, Martín Illescas, uno de los directores, los propuso alegando gran admiración hacia su trabajo. Creo que después de eso he escuchado a Martín recomendarlos infinitas veces, por lo que puedo asegurar que esa admiración continúa y nos la va contagiando a varios por el camino.
La fotografía de calle puede parecer sencilla para el que no la conoce o practica, pero es mucho más que salir a caminar con la cámara y apretar el botón. Encontrar juegos de colores, asociaciones de formas, yuxtaposiciones divertidas y todo lo que logra Shot en el mundo que todos vemos a diario, es solo gracias a una práctica constante y un entrenamiento en la observación, que hace que Gustavo y Gonzalo vean un mundo que los demás no estamos capacitados.
Dejo un poco de los autores en palabras de ellos mismos, e invito a que sigan tanto a @gustavorosasfoto y @gonzalogomez.foto, como a la maravilla que crearon juntos: @shot.proyecto
¿Cómo empezaste en la fotografía y qué te inspiró a seguir este camino?
Gustavo Rosas (G.R.): En 2012, mientras estudiaba Bellas Artes, me compré una cámara compacta y empecé a caminar con frecuencia por la rambla, capturando imágenes. Aunque siempre me había atraído el cine y las imágenes en general, fue en ese momento cuando me conecté con la fotografía al descubrir el trabajo de fotógrafos históricos y colectivos como In-Public y Burn My Eye, los cuales resultaron ser profundamente inspiradores y motivadores para mí.
Gonzalo Gómez Gaggero (G.G.G.): Mi interés por la fotografía comenzó mientras cursaba la tecnicatura de Diseño Gráfico, ya que para las entregas, aparte de los diseños vectoriales, nos valíamos de la fotografía como insumo para agregarle valor a las mismas. Luego de culminar la tecnicatura y mientras estaba trabajando en una agencia de publicidad, empecé a involucrarme con la capacidad narrativa de la fotografía y su poder para evocar emociones. Entonces me compré la cámara Fujifilm X100 y comencé a salir a la calle a captar momentos espontáneos.
¿Cómo definirías tu estilo fotográfico y por qué?
G.R.: Diría que mi estilo se enfoca en retratar lo humano y las interacciones espontáneas entre las personas y su entorno cotidiano. Para mí, es un proceso continuo de aprendizaje y experimentación.
G.G.G.: Lo definiría como urbano, espontáneo, humanista.
¿Cómo elegís tus sujetos o temas?
G.R.: Creo que, en lo personal, mi elección es más intuitiva que racional. Me interesa la gestualidad y singularidad de las personas, y todo lo que evoca su presencia, cada una aportando su propia narrativa a la imagen. Me atraen especialmente aquellas situaciones que transmiten algún tipo de emoción o sorpresa.
G.G.G.: En la fotografía callejera, considero que la intuición hace que uno resuene con determinadas situaciones a la hora de sacar una foto. Alguna particularidad en la persona como puede ser un gesto, una pose, un detalle de su vestuario o una mirada, que abre unos instantes la puerta para contar algo sobre ella, o para dejar planteada una pregunta.
En cuanto a los temas, trato de abordar diferentes momentos que pueden incluir la ironía, el humor, el drama o el amor. La diversidad de espacios también juega un papel importante, ya que una misma persona fotografiada en distintos lugares puede tener connotaciones opuestas, dependiendo del ambiente generado por el diseño urbano, la arquitectura y la iluminación.
¿Cuál consideras que es tu proyecto/foto más significativa hasta ahora y por qué?
G.R.: Considero que el proyecto de fotografía callejera llamado Shot, que venimos realizando con mi amigo y colega Gonzalo Gómez, es el más significativo hasta ahora. Es un proyecto a largo plazo en el cuál compartimos una visión común sobre la fotografía callejera, y resulta apasionante la idea de seguir trabajando en él mientras la ciudad y su gente van evolucionando.
G.G.G.: El proyecto sobre fotografía callejera Shot, el cual llevo adelante con mi amigo y colega Gustavo Rosas, porque se logró darle un carácter unificado y coherencia visual entre las dos miradas, y porque es de largo aliento.
¿Cómo influyen tus experiencias personales en tu trabajo fotográfico?
G.R.: Siento que influyen de manera significativa; cada fotografía surge, de algún modo, de mis experiencias y de la conexión que tengo en ese momento con lo que observo.
G.G.G.: Influyen de manera determinante. Creo que las experiencias vividas son las que activan de forma inconsciente la preferencia por determinados temas y forma de trabajar.
¿Qué fotógrafos/as o artistas influyen en tu trabajo?
G.R.: Me inspira el trabajo de fotógrafos y fotógrafas como Cristina García Rodero, Garry Winogrand, Joel Meyerowitz, Helen Levitt, Alex Webb, Graciela Magnoni, Jeff Mermelstein, Harry Gruyaert, Vivian Maier, Saul Leiter, Richard Avedon, Julia Coddington y James Nachtwey, entre otros.
G.G.G.: Muchos y muchas, si tuviera que hacer un listado seguramente me olvidaría de alguno/a, pero los que me vienen a la mente son: Henri Cartier-Bresson, Garry Winogrand, Elliot Erwitt, Diane Arbus, Helen Levitt, Joel Meyerowitz, Harry Gruyaert, Alex Webb, Jeff Mermelstein, Helmut Newton, Vivian Maier, Gregory Crewdson, Matt Stuart, Julia Coddington.
¿Cómo es tu proceso creativo, desde la idea hasta la captura final (o finalización del proyecto)?
G.R.: Salgo a caminar con la cámara y trato de mantener una actitud abierta y relajada. Las ideas surgen de lo que voy observando; a veces me concentro en las personas y sus interacciones, otras en la luz, en detalles pequeños o en lugares que me parecen especiales, esperando captar algo interesante, si ocurre.
G.G.G.: Es un proceso intuitivo, al estar enfrentando situaciones fortuitas en la vía pública. Más que nada lo principal es poner la mente en un nivel más meditativo.
¿Cómo manejás los desafíos técnicos o creativos en tus proyectos/fotos?
G.R.: Suelo utilizar el modo de prioridad de velocidad en la cámara y voy ajustando la sensibilidad según la luz disponible. Así, ahorro tiempo y evito que los aspectos técnicos me distraigan, lo que me permite enfocarme mejor en lo que tengo frente a mí.
G.G.G.: Trato de tener una cámara que responda bien en una diversidad de escenarios lumínicos posibles, para de esta manera concentrarme exclusivamente en la parte creativa.
Más allá de lo que hagas habitualmente, ¿preferís trabajar con luz natural o artificial? ¿Por qué?
G.R.: Me gustan ambas, ya que tanto la luz natural como la artificial pueden ayudar a generar ciertos climas y/o atmósferas que potencien de algún modo la escena.
G.G.G.: Ambas situaciones de luz me resultan atractivas, cada una tiene sus fortalezas y se pueden moldear o modificar para conseguir determinado ambiente.
¿Cómo seleccionás las imágenes que exhibís o que forman parte de un proyecto?
G.R.: Hago una primera selección de las fotos que considero mejor resueltas y que, al compartir elementos en común, pueden funcionar juntas, buscando una coherencia visual y narrativa. Luego, las dejo reposar un tiempo para revisarlas con distancia y así confirmar la selección, o hacer ajustes si es necesario.
G.G.G.: Trato de distanciarme y mirarlas con objetividad, para encontrar patrones que las relacionen entre sí en el caso de que sea una serie, como si se tratara de una canción con sus variaciones en el ritmo.
¿Qué equipo fotográfico es esencial para vos y por qué?
G.R.: Es esencial para mí tener una cámara pequeña y cómoda que pueda llevar siempre conmigo. También suelo usar lentes de 28 y 35 mm, y a veces, un 50 mm.
G.G.G.: Una cámara que responda en una variedad amplia de situaciones, un lente zoom 24-70 mm. rápido, un lente de focal fija de 35 mm., un trípode, un flash, un reflector 5 en 1 .
¿Cómo ves el futuro de la imagen en tiempos de inteligencia artificial?
G.R.: Pienso que la inteligencia artificial es una herramienta más que se suma a las ya existentes, y todas pueden coexistir manteniendo su propio valor. Pienso que, al final, siempre dependerá de la sensibilidad y el uso que los creadores le den a cada herramienta.
G.G.G.: No es algo que me inquiete actualmente, en la medida en que tengo la convicción de que los creadores/as que no usan la IA seguirán imprimiendo su sello distintivo a sus trabajos. Aunque habrá que estar actualizado sobre el tema para ver los cambios que se van dando, y cómo se ve afectada la forma de consumir las imágenes.
¿Qué foto icónica de la historia te hubiera gustado hacer vos?
G.R.: Me habría gustado capturar, por su fuerza visual y su significado, la icónica foto de Charlie Cole, tomada en China en 1989, donde un hombre se planta frente a una fila de tanques en señal de protesta, horas después de que cientos de jóvenes murieran en la plaza, mientras el gobierno intentaba ocultar los hechos.
G.G.G.: La foto del niño desnutrido a punto de desvanecerse, y un buitre esperando a unos metros de distancia, tomada en Sudán por Kevin Carter en el año 1993. Creo que sobrepasó el estatus de icónica y se convirtió en un símbolo, no sólo de la hambruna y dificultades del continente africano, sino también de las desigualdades sociales y económicas a nivel mundial.
¿Cómo consideras que la fotografía puede influir en la cultura y la sociedad?
G.R.: Creo que la fotografía nos da diferentes maneras de ver el mundo, y nos ayuda a pensar sobre él. También es una forma de contar historias y compartir la memoria, tanto personal como colectiva, de generación en generación.
G.G.G.: Considero que puede influir a generar reflexión y despertar sensibilidad sobre diversos temas. Por ejemplo, con referencia a la respuesta anterior de la foto del niño desnutrido y el buitre, su connotación simbólica tuvo un impacto universal y fue una interpelación al sistema.
¿Cómo influyó la fotografía en tu vida?
G.R.: La fotografía me ha ayudado a expresarme, y a reconectar con el sentido lúdico y la curiosidad que tenía cuando era niño, observando el mundo con asombro.
G.G.G.: Positivamente. Pienso que la fotografía, al igual que cualquier forma de expresión personal artística, es una manera de tener una mejor salud mental. Siempre que se tenga la oportunidad y tiempo para practicarla, por supuesto.
¿Tenés algún proyecto futuro o meta que te gustaría alcanzar en la fotografía?
G.R.: Me gustaría tener la oportunidad de conocer y explorar muchos otros lugares y culturas con la cámara.
¿Qué foto te queda aún por sacar?
G.G.G.: Me interesa la fotografía aplicada al campo audiovisual; la dirección de fotografía al servicio de la narración y del guión. Esto se reforzó luego de cursar dos años de realización audiovisual en la escuela UCF.
G.R.: No sabría decirte cuál exactamente, pero me encantaría que fuera una foto que, después de muchos años, siguiera sorprendiéndome.
G.G.G.: Prefiero no saber la respuesta, así me mantengo motivado tratando de buscarla.