¿Estás entre esas personas que piantan un lagrimón cada
vez que ven un Atari, una botella de leche de vidrio o se
encuentran en el altillo con los restos del Simon?

En nuestro espacio clásico de Qué es de la Vida, abrimos
una sección destinada a recordar y repasar la historia de
los objetos que marcaron parte de nuestras vidas y
desaparecieron con los años.





 
 
 
  La Mujer Maravilla  
  Giraba hasta transformarse en superheroína. Hoy te sacamos el mareo y te contamos su historia.
El rico universo de DC Comics está regido por tres superhéroes, quienes por su influencia en el género se convirtieron en referentes dentro y fuera de la ficción. Uno de ellos es Súperman, quien inauguró los superpoderes, el traje y la identidad secreta. El segundo es Batman, heredero del pulp y con un arsenal de elementos para la lucha contra el crimen.

En tercer lugar se encuentra Wonder Woman, o la Mujer Maravilla, creada en 1941 de la pluma de William Moulton Marston, el mismo que inventó el polígrafo o detector de mentiras.

La Mujer Maravilla es hija de Hipólita, reina de las Amazonas. En la historia original de Moulton Marston, el piloto Steve Trevor se estrellaba en la Isla Paraíso, en donde solamente habitaban mujeres. Hipólita decide que una de las isleñas lo acompañe de regreso al "Mundo de los Hombres" y para ello organiza un concurso.

A su hija, en realidad llamada princesa Diana, le impide participar. Pero ella está enamorada de Trevor, así que entra en el torneo utilizando un disfraz, y gana el derecho a regresar con él. Allí pelearía contra los nazis en la Segunda Guerra Mundial, como era costumbre de los personajes superheroicos en esa época.

Algo muy común en los primeros cómics de la Mujer Maravilla eran las escenas de mujeres sometidas, generalmente con ataduras. Estos elementos, así como la debilidad de Diana (que perdía sus poderes si un hombre juntaba sus dos brazaletes) fueron objeto de discusión durante muchos años. Algunos creen que el creador del personaje lo utilizaba para canalizar sus fantasías sexuales, otros que buscaba influenciar el despertar sexual de sus lectores jóvenes.

Lo único cierto es que la Mujer Maravilla fue siempre un personaje cuya feminidad estaba a flor de piel, no solamente por los reveladores atuendos, sino por el mensaje a favor de las mujeres que divulgó tradicionalmente.

En el momento más delirante de la historieta americana, Diana compartió aventuras con su versión adolescente (la Chica Maravilla) e infantil (la Pequeña Maravilla, que no debería confundirse con la protagonista de la comedia de situación homónima). Era cuando Batman tenía aventuras en otros planetas y Superman poseía decenas de poderes, incluyendo el super-ventriloquismo.

La versión setentera de la Mujer Maravilla olvidó su traje colorido y se concentró en las aventuras de Diana, que había perdido sus poderes, realizando misiones de espionaje vestida por completo de blanco y utilizando sus conocimientos de artes marciales.

Por aquellos años surgió lo que la mayoría del público conoce: la serie de televisión protagonizada por Lynda Carter. La heroína adopta la identidad de Diana Prince, también creada en los cómics, y con la que mantuviera durante años un triángulo amoroso Maravilla-Trevor-Prince.

La primera temporada se desarrollaba en los años 40, con los villanos nazis de turno. Allí se creó el famosísimo efecto de la transformación entre Diana Prince y la princesa Diana (y Trevor nunca se dio cuenta... hombres). Ella se quitaba los lentes y el sombrero, comenzando a girar con los brazos extendidos, hasta transformarse en la Mujer Maravilla.

Para su segunda temporada, encontramos a Diana regresando al Mundo de los Hombres luego de 35 años. Los productores buscaron darle más actualidad a la serie, y aquellos elementos de espionaje que eran tan populares en televisión y en el propio cómic.

En 1985, cuando todos los personajes de DC fueron renovados y su historia volvió a escribirse, la herencia griega de las Amazonas cobró una importancia mucho mayor. El nuevo personaje no tenía una identidad secreta, sino que ocupaba todo su tiempo como embajadora de su pueblo en la Tierra.

Actualmente, mientras Hollywood tiene su película en el limbo, la Mujer Maravilla continúa siendo un personaje muy difícil de escribir, aunque por primera vez una mujer tomará las riendas de su serie regular. Quizás sea un futuro promisorio para esta fémina de armas tomar.

Presentación de la serie de TV

Recopilación de la versión animada