Convocarán a Bonomi y Layera a la Comisión de Seguridad del Senado

El senador del Partido Nacional Guillermo Besozzi convocará al ministro del Interior, Eduardo Bonomi y al director Nacional de Policía, Mario Layera a la Comisión de Seguridad de la Cámara Alta para que den explicaciones sobre lo planteado por Layera en una entrevista realizada por el diario El Observador, en la que Layera expresó una visión apocalíptica de la evolución de la seguridad en nuestro país.

Durante la entrevista Layera comentó que la falta de intercambio de información entre organismos del Estado es clave para explicar las dificultades para combatir la delincuencia y auguró que si la gestión no mejora Uruguay va a terminar como Guatemala.

En conversación con Montevideo Portal, el senador Javier García dijo que pasamos “de ser la Suiza de América a ser la Guatemala de América del Sur” y lamentó que desde el propio Estado se echen la culpa entre los ministerios.

“Layera tiene el tercer cargo en el ministerio y es el policía número uno del país. ¿Cómo puede sentirse un ciudadano que va a hacer una denuncia a una comisaría si él dice que estamos regalados?”, señaló.

“Dice que el Estado, que el gobierno que él integra no cumple las leyes por no tomar medidas que pueden resultar no simpáticas. Que el director Nacional de Policía reconozca que no cumplen las leyes por temor es una afirmación muy fuerte y muy grave”, agregó y señaló que le llamó la atención que las declaraciones se realicen en momentos en que el ministro se encuentra de vacaciones.

Para García se está viviendo “una crisis de inseguridad e impunidad absoluta”, que también deja desprotegidos a los policías, que sufren las consecuencias de la delincuencia.

Los dichos de Layera

“El gobierno está muy compartimentado. La Policía no accede a determinada información que tiene el Mides porque dicen que es reservada. No accedemos a información del BPS ni a la de Secundaria o Primaria que nos permitiría contextualizar y ver el perfil de la gente con la que estamos tratando. Saber cuántos estudian, cuántos están registrados en el BPS y podemos saber cuántos están afuera del sistema. No quiere decir que todos sean violentos, pero nos da una idea del crecimiento, pero eso no funciona. Allí hay problemas en el primer nivel de socialización, que es la familia. Luego no van a estudiar. Tienen generaciones de familiares con antecedentes. Y allí está el mayor nivel de reproducción. Un día los marginados van a ser mayoría. ¿Cómo vamos a contenerlos?”, cuestionó Layera.

“El Estado se verá superado, la gente de poder económico creará su propia respuesta de seguridad privada, barrios enteros cerrados con ingreso controlado y el Estado disminuirá su poder ante organizaciones pandilleras que vivan de los demás, cobrando peaje para todo”, auguró Layera quien comparó el escenario con “El Salvador o Guatemala”.

“El problema es el temor del Estado de tomar decisiones difíciles para contener esto que hoy lo podemos parar pero con medidas no simpáticas. Por ejemplo, un control estricto de la concurrencia a los centros de estudio y que se llegue al retiro de la patria potestad. Eso es ley, solo que no se cumple, hemos caído en una anomia social en la que no se cumplen las leyes y nadie quiere hacerlas cumplir estrictamente. Y cuando hablan de eso mandan a la Policía al frente en vez de enviar asistentes sociales que tengan un registro histórico de esas poblaciones. Ahí es más eficiente un trabajador social que un policía”, agregó.